Mostrando entradas con la etiqueta una proposicion atrevida. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta una proposicion atrevida. Mostrar todas las entradas

viernes, 17 de febrero de 2012

una proposicion atrevida-cap-63




-Llegué hasta la esquina y volví a tiempo de ver que la niñera se iba -nick le dirigió a ella una curiosa mirada evasiva-. Parece ser que le dijo a Thompson que se iba porque no podía permanecer ni un minuto más en una casa donde los dueños son tan inmorales. La puerta y la discusión deben haberla impresionado mucho... puedes culparme a mí. Yo fui quien empezó todo.
-Ella me resultaba muy antipática -respondió miley sin titubeos-. Preferiría alguien más joven que no fuese tan estricta.
-Thompson ya me ha hablado de una sobrina suya. Se ofendió mucho ante la insinuación de que nuestra moral no es correcta -la voz de nick tembló y después se calmó cuando miró el ansioso rostro de miley. Posó una mano sobre uno de los hombros de ella para guiarla con inexorabilidad hacia la puerta-. ¿Sabes? Hace un momento, antes de que tú llegaras, hablé con Marcos de hombre a hombre. Él es una persona que sabe escuchar -abrió la puerta de su dormitorio-. Entra, tenemos que hablar y en la sala no podemos, porque Thompson la está arreglando.
-Hace mucho tiempo que debí haberte dicho que... -empezó a decir miley, una vez dentro de la habitación.
-Si vas a disculparte por algo, te estrangularé -la interrumpió él pesaroso-. Esta noche vine a ti tan hambriento de sexo como un adolescente. Simplemente perdí la cabeza cuando te vi con él, pues no pude soportar la idea de que lo preferías a mí. Parece una reacción muy infantil -suspiró-. Pero en ese momento no me sentía nada infantil, ni tampoco te agradecí que lo mintieras porque era el proceder correcto. Si lo hubieses alentado, lo habría arrojado por el hueco del ascensor. Lo que trato de decirte, aunque sé que no lo hago bien, es que... lo siento.
-No lo alenté porque... -ella lo miró a los ojos.
-Porque eres demasiado leal para hacerlo -la interrumpió nick de nuevo con una sonrisa.
Él era muy lógico en sus explicaciones sobre sus motivos para comportarse como lo había hecho, pero a ella no la dejaba hablar porque, con su enloquecedora forma de ser, presuponía las respuestas de ella.
-No pensarás irte a algún sitio, ¿verdad?- Angustiada, miley lo negó con un movimiento de cabeza.- Y él no volverá por aquí, ¿o sí?
Ella volvió a expresar su negativa con la cabeza y nick sonrió.
-Te amo -declaró miley en un murmullo.
nick la observaba de manera casi ausente.
-¿Sabes lo que me hizo volver cuando llegué a la esquina? Pensar en que podrías irte... para mí es un infierno vivir a tu lado y no tocarte -admitió nick.
miley pensó que él no sólo no la había escuchado, sino que se mostraba dudoso acerca de la reacción de ella.
-Te amo -repitió miley con fuerza-, así que no sé por qué te preocupas por la posibilidad de que me vaya. En realidad, mi amor ha sido obsesivo, ya que no puedo soportar que te alejes de mi vista -una pesarosa sonrisa escapó de sus resecos labios-. Debí habértelo dicho hace mucho tiempo y entonces no hubieras interpretado mal lo de liam, pero no quería que sintieras lástima de mí... y... después... se convirtió en orgullo.- Aunque él no se había movido, la miraba fijamente.- Bien, creo que podrías decir algo -continuó ella con una vocecilla rígida con la que trataba de disimular su dolor-. No tengo la esperanza de que correspondas a mi amor, pero tenemos otras cosas en... -se detuvo al notar la forma en que nick la observaba.
-¿Desde cuándo me amas? -preguntó él al estrecharla con fuerza entre sus brazos.
-¡Quizá lo he hecho durante la mayor parte de mi vida! Sólo que hasta que estuvimos en Dominica no me di cuenta de que no había sido consciente de ese sentimiento. Creo que por liam sentía algo de afecto, tal vez por lo sola que estaba.
-¿Le dijiste a él la verdad esta noche cuando le aseguraste que me amabas a mí? -se apresuró a preguntar nick, mientras con sus largos dedos enmarcaba el rostro de ella.
-Sí -contestó miley con sencillez.
-¿Y no sabes lo que siento por ti, mi loca mujer? -le dio una ligera sacudida-. ¿Debo contratar una flotilla de aviones comerciales para que lo pongan por escrito en el cielo? Todo el mundo, menos tú, se ha dado cuenta de que te amo... si no hubiera sido así, no te habría traído aquí de nuevo -su respiración era agitada-. Tú embarazo me proporcionó el pretexto que necesitaba; tenía preparada una extensa gama de conmovedores argumentos para convencerte, pero no tuve necesidad de usarlos porque tu accediste... si me hubieses hecho llegar hasta el último extremo, te habría dicho entonces que te amaba.
La apretaba con tanta fuerza, que a ella le dolieron las costillas, pero no emitió ni una sola queja.
-¿De verdad me echaste de menos cuando me fui de Dominica? -preguntó al empezar a sentir una extraña laxitud que la hacía sentirse como en el cielo.
Él emitió un gruñido y con facilidad la levantó en brazos para llevarla hasta la cama y quedar ambos sobre las sábanas.
-El día en que te pusiste enferma fue cuando me di cuenta de que te amaba. Verte llorar me afectó profundamente. Antes, me decía a mí mismo que sólo sentía cariño por ti, pero había muchas cosas que pasaba por alto. Aquella mañana en el Dorchester, cuando te encontrabas en cama... -sonrió a medias-. Trataba de averiguar por qué me parecías tan sexy aun con aquel horrible camisón, pero entonces no me gustó mi línea de pensamientos y me marché. Cuando me acosté contigo ya no pude alejarme de ti. Siempre me sentí posesivo contigo -musitó pesaroso-. Aunque realmente no me di cuenta de ello hasta que me dijiste que te ibas con otro hombre y no me gustó la idea.
miley lo contempló, aturdida.
-Pero aquel día me preguntaste acerca de liam, dijiste que...
-Me alteré mucho cuando vi aquellas malditas fotografías. Me imagino que en cierto modo fue algo gracioso y que me lo merecía... pero... me prometí que, después de todo el daño que te había hecho, trataría de arreglar las cosas para ti si podía -confesó con voz tensa-. Y si lo que tú querías era estar con liam, entonces yo no tenía ningún derecho a retenerte. Casi me volví loco mientras pensé que vivías con él.
-Pero me dejaste ir, ¡y hasta me sonreíste cuando me despediste en el aeropuerto!
-Creí que estabas enamorada de él, aunque todo el tiempo que pasamos juntos en Dominica traté de hacer que te enamoraras de mí -alzó una de sus arrogantes cejas-. Pero, maldita sea, contigo no pude lograr nada.- miley, quien nunca en su vida había tratado de seducir a alguien, empezó a desabrocharle la camisa con dedos torpes, pero nick no lo notó. -Todo lo que hice en Dominica me salió mal. Diablos, no sé cómo demostrarle a una mujer mi amor por ella... no quería volver a asustarte, así que no te toqué, pero tú no soportabas ni siquiera mi cercanía... y eso me dolió, y mucho, porque no trataba de llevarte a la cama. Ya había aprendido la lección. Antes tenía que lograr que me quisieras.
-Aquella noche en la playa, me alejaste de ti...
-Creí que todo lo que me ofrecías era sexo... eres muy buena actriz: eras amistosa, pero al mismo tiempo distante. ¡miley! -frunció el entrecejo al mirarla-. ¿Qué haces?
-¿Y tú qué crees? -libre de todas sus inseguridades, miley empezaba a hacer realidad todas las fantasías de eróticas posibilidades que se le habían ocurrido durante sus largas y solitarias noches del año anterior. Acercó los labios contra el rápido latir del corazón de él y la punta de su lengua inició una inquietante senda a través de su negro vello del tórax hasta llegar a uno de aquellos masculinos pezones.
Dios mío -exclamó el asombrado nick, mientras sentía que una de las manos de ella se deslizaba hasta su vientre, seguida con rapidez por la boca. Aquellas exquisitas manos femeninas, se dedicaron entonces a desabrochar el cinturón con renovado brío.
nick perdió la inmovilidad cuando sintió que las manos de su esposa llegaban a los firmes músculos de sus muslos.
-¡Esta es la primera vez que tú tomas la iniciativa! -exclamó al ayudarla a colocarse encima de él.
Sus brillantes ojos fijaron su mirada en los de ella durante un estremecedor segundo, antes de que sus manos tomaran sus senos y su boca se apoderara de la de ella con un súbito y fiero deseo. miley emitió un suave gemido, y él no necesitó mayor invitación... intensa y sin control, la excitación hacía explosión entre ellos. Todo sucedió con demasiada rapidez. Él la penetró por medio de un solo y apremiante movimiento y en ese instante el mundo pareció estallar en mil pedazos. Nick emitió un jadeo de asombrado placer. Ella se sentía la mujer más deseable de la tierra, pero, al poco rato, el glorioso y absoluto poder de su acto de amor los hizo olvidar a ambos cualquier otra cosa.
-Me siento muy bien -expresó después ella, lo que hizo sonreír a nick.
-No necesitas parecer tan sorprendida.
-Me parece que podría volar.
-¡Pero no sin mí! -nick se incorporó, apoyado en un codo, y la contempló extasiado, sin ocultar ningún sentimiento-. Esta es la felicidad -musitó casi sin aliento, lo que hizo que a ella se le llenaran los ojos de lágrimas.
-No debiste haberme dejado ir de Dominica.
-miley, ese fue el acto menos egoísta de mi vida. Me hizo sentirme bien durante toda una hora. La paciencia no es una de mis cualidades. Además, tenía la esperanza de que al fin y al cabo liam y tú no fueseis compatibles, y cuando supe que no le habías escrito a Lew para pedir el divorcio, mis esperanzas aumentaron, pues me imaginé que no serías feliz al vivir en pecado. miley, no vuelvas a ponerme celoso -la dijo con una sombría burla de sí mismo-. Los celos son un infierno.
Ella presionó sus labios contra la suave superficie de uno de los hombros de nick.
-Lo siento, yo no sabía -tragó saliva-. ¿Hubo alguien más para ti?
-No quise tener a nadie más -declaró él con firmeza-. Te deseaba a ti y sólo a ti.
miley se sintió invadida por la euforia. ¡Él era suyo, sólo suyo!
-Y respecto a Mei Ling... - nick pasó los dedos entre el sedoso cabello de su mujer-. Cuando me di cuenta de que nos habías visto, no la separé de mí a propósito, ya que quería ver si tú te ponías celosa. Claro que no fue un proceder muy inteligente -lamentó pesaroso.
Los dedos de ella se deslizaron sugestivos a lo largo de los costados de nick.
-La siguiente vez que te sorprenda...
-No te preocupes, ya me he reformado -le dirigió una mirada que disipó cualquier sombra de duda.
-Y así como la alfombra y las sábanas de la cama, tú me perteneces, ¿de acuerdo?
-¿Qué dije acerca de la confianza en ti misma? -se apoyó contra las almohadas, y su viril y hermoso cuerpo presentó una imagen de pura provocación-. Esta noche estaba dispuesto a humillarme.
-Te amo.
-No dejes de decirlo -sus brazos la estrecharon con fuerza y empezó a besarla de nuevo. Ella tomó nota mental de decirle a su hija cuando ésta creciera, que a veces las fantasías se hacen realidad.
FIN
-----------------------------------
Final dedicado a todas aquellas personitas que aman esta nove espero que les haya gustado mucho y poes agus fue la primeraque me insistio en seguir esta nove por que no fuera hasi creanme no la hubiera seguido asi que Gracias agus! aparte de que ella me convencio de subir el final gracias agus mi hermanita perdida que siempre siempre me hace olvidar  hasta de mi nombre jeje gracias a todas las personitas que leyeron esta nove misles de gracias.

jueves, 16 de febrero de 2012

una proposicion atrevida-cap-62


-Qué desesperado debes estar para haberte acercado a mí -le espetó a él con inevitable amargura. Ella hablaba como una esposa insegura y celosa.
-miley...
-Prefiero dejar las cosas como están -lo interrumpió miley con voz temblorosa-. Es más saludable.
-Discúlpeme, señora... Señor Visconti, necesito... -expresó la desaprobadora voz de la niñera, momento que aprovechó la ruborizada miley para huir hacía su habitación, donde se encerró con llave.
-¡miley, te ordeno que abras la puerta! -exclamó nick poco después, mientras movía el picaporte de bronce con desesperación.
-¡Vete de aquí! -fue la respuesta de ella. De pronto, se escuchó un estrépito, y la puerta saltó de sus goznes.
-¡No vuelvas a cerrar una puerta con llave para que yo no entre!
El ambiente era explosivo. miley, quien se había echado sobre la cama, retrocedió hasta la cabecera. Durante diez interminables segundos, nick no dijo nada.
-Si tanto lo quieres, vete con él -declaró con calma-. Soy un cerdo, ¿verdad? No dijiste nada malo. Sólo que no me amabas. Te quedarías porque me prometiste quedarte; y por los mellizos... y... la única maldita cosa que no puedes controlar es tu respuesta sexual hacia mí, y ahora mismo eso es lo que te aterroriza. No va de acuerdo con la imagen de mártir.
miley  se sintió paralizada ante las primeras palabras. nick le invitaba a irse.
-nick, no has... no has comprendido bien.
Él le dirigió una mirada de desdén.
-En esto no hay ningún malentendido -la contradijo con salvajismo-. Hasta hoy, de verdad creí que las cosas iban por buen camino entre nosotros... pero... ¡qué demonios! si quieres pensar en otro tipo, puedes hacerlo en cualquier lecho, menos en el mío. El pequeño idi*ota ni siquiera te fue fiel. ¡Mientras que yo llevo un año sometido a una maldita castidad! Pues bien, éste es el fin. Puedes hacer lo que te dé la gana, miley, ¡pero esta noche voy a ser atendido por una mujer cálida y comprensiva!
Aquella amenaza la hizo alejarse de la cama con rapidez.
-¡Si haces eso, no te molestes en volver a casa? ¿Estuviste...? -sus labios se movieron de manera convulsiva, su cerebro dio marcha atrás-. ¡Un año de castidad! -musitó aturdida-. ¡nick, yo no estoy enamorada de liam!
Pero sus palabras las captó sólo el aire. Entonces oyó a Thompson hablar con nick, aunque no se imaginó de dónde habría sacado el mayordomo el valor de interpelarlo a pesar de lo alterado que estaba su amo.
-¿Debo llamar a un carpintero mañana, señor?
En el espacio de una sola tarde, el matrimonio reconstruido con tanto cuidado se había venido abajo. Mas... ¿qué clase de relación esperaría que iba a tener si había dejado creer a nick que todavía amaba a liam? Sin importar que no la amara, él siempre había sido sincero... ella no, se había ocultado tras la verdad como si fuese algo de lo que debía avergonzarse; y al hacerlo así, había alejado a nick.
Tardó treinta segundos en llegar a la puerta de la calle, pero el ascensor ya se había ido. Cuando regresó y ella pudo bajar al aparcamiento subterráneo, al único que encontró allí fue a un guardia de seguridad. El Ferrari de nick ya no estaba... enloquecida, volvió al ascensor.
Sí la había oído decirle a liam que amaba a su esposo, pero no la había creído. Desconsolada, vio entonces la barrera que ella misma había erigido entre ellos. nick no le haría el amor a ella mientras se imaginara que soñaba con otro hombre... y... sólo la furia lo había hecho expresar su insatisfacción. No obstante, tendría que estar loca para creer que durante todo el tiempo que había dicho no había estado con ninguna otra mujer... mucho menos durante la época en que él creyó que ella estaba viviendo con liam. Si nick iba esa noche a buscar a alguien más, la única culpable sería ella... su estúpido orgullo lo había estropeado todo. Ya en su habitación, se preparó para meterse en cama. Hiciera lo que hiciese nick esa noche, era culpa de ella. Ya era hora de que fuese sincera con él, aunque le doliera. Después de casi volverse loca al tratar de imaginarse dónde se encontraría nick, fue a ver cómo estaban los mellizos.
Al entrar en la habitación de los niños, lo primero que vio fue la alta y esbelta figura de nick, quien en ese momento acostaba a Marcos de nuevo en su cuna. Ella exhaló entonces un gran suspiro de alivio.
-¿Cuándo has vuelto? -fue su prosaica pregunta. 
---------------------------------------------------------
dedicado a emiii que la extrañoo muchisisismo por sierto el proximo capi el final jojojo las quieor mucho cuidense

martes, 14 de febrero de 2012

una proposicion atrevida-cap-61



-Cuando está enojado... -molesta por el comportamiento de nick, se apresuró a dar término a la entrevista-. Lo siento, pero es mejor que te vayas. Te deseo lo mejor.
-Él no te ama -se burló liam-. Es un tipo que abusa de las mujeres, es...
-¿Sabes? Me habría parecido mejor que se lo dijeses a él a la cara.
liam se fue, y, mientras duró la fiesta, miley procuró mantenerse fuera del alcance de nick. ¿Por qué se atrevería nick a echar a liam sólo por haberla ido a visitar, si él quizá se había ido a la cama con una docena de mujeres diferentes mientras estuvieron separados? Y también, había muchas probabilidades de que lo hubiese hecho después de su reconciliación... esa era la explicación para la falta de interés sexual en su esposa... estaba claro que su satisfacción física la encontraba en otra parte.
Fue una ironía, pero a causa de los hipócritas comentarios que liam había hecho sobre nick, ella se vio obligada a volver a la realidad. Amaba a su esposo más de lo que es saludable amar a nadie.
-¿Qué le pasa a nick? -preguntó Fuzz en cierto momento.
-Nada -le respondió miley.
-Luigi dice que parece furioso por algo. Yo no lo noto enojado, sino que lo veo que sonríe.
¿Por qué iba a estar furioso? Ella no había invitado a liam... pero... nick creía que ella todavía amaba a liam... pensó de pronto miley, y entre el caos de sus pensamientos penetró la idea de que ella nunca había dicho lo contrario; dirigió una mirada rápida hacia la habitación en la que nick charlaba con algunos amigos. ¿Cuánto habría oído de su conversación?
El último de sus invitados se marchó cuando ya había anochecido. Después de despedirlo, miley se encaminó a toda prisa hacia la escalinata, pero una mano se posó con fuerza sobre uno de sus hombros y la hizo volverse.
-¿A dónde vas? Si es a tu dormitorio, te acompañaré. Pero antes... -sus manos se deslizaron a lo largo de la espalda de ella hasta llegar a la parte más prominente de su trasero para atraerla hacia él y que quedara en completo contacto con su cuerpo-, esto.
Tomada por sorpresa, las necesidades y deseos de su cuerpo afloraron sin control. El efecto que le causó él después de tanto tiempo fue explosivo.
-Si aguardara una invitación, tendría que esperar para siempre -dijo nick con aspereza-. ¿A qué ha venido él?
-Fue una visita social -aseguró ella, mientras con desesperación trataba de liberarse.
-¡Al demonio con su visita social! ¿Crees que no pude oír que te disculpabas por la trampa en la que te encuentras a causa de los mellizos? -exclamó nick furioso-. Pero eso sí, miley, te lo advierto, si te llegas a ir de aquí, lo harás sin los niños; pero si te quedas, será en mi lecho. Ya no soportaré más otro tipo de situación... es hora de que recuerdes que eres mi esposa y que las esposas tienen ciertas obligaciones...
-No -declaró miley de manera escueta e inequívoca. nick no iba a usar de nuevo el sexo para subyugarla. La visita de liam había herido su orgullo y por eso reaccionaba de ese modo. Lo irónico del caso era que si la hubiese invitado a su lecho el día anterior, ella se habría arrojado ansiosa a sus brazos, convencida por fin de que su matrimonio tenía futuro... pero... no así, no cuando él estaba enojado y su deseo estaba motivado sólo por la terrible sospecha de que su hogareña esposa prefería a otro hombre.
-------------------------------------------------
FELIZ DIA DE SAN VALENTIN!!
espero que les guste el capi nena y espero que se la esten pasando de lo mejor encerio chicas un abrazon grandote y un besaso chau

sábado, 11 de febrero de 2012

una proposicion atrevida-cap-60


-kevin. Cuando me di cuenta de lo que habías hecho por mí... el sacrifício que... -el hombre parecía muy pagado de sí mismo.
Con un esfuerzo, miley logró liberar su mano, mientras en la mente maldecía a kevin. Él no tenía ningún derecho de contarle a liam lo que Hilario había dispuesto en su testamento.
-¿A qué sacrificio te refieres? -preguntó ella con rigidez.
-Al hecho de que te casaste con nick. He visto en el periódico algunas fotografías de tu esposo con otras mujeres, yo...
-liam, discúlpame, pero mi matrimonio no es en absoluto de tu incumbencia.
-Mira, Sue... bueno, ella fue...
-Esto no tiene nada que ver con esa mujer -dijo miley con desesperación-. kevin no tenía ningún derecho a darte una impresión equivocada. ¿Pero qué importa eso ahora? Yo estoy enamorada de nick.
liam la contempló con irritante incredulidad.
-No es posible -arguyó-. Tu primo me dijo que si te casaste con él fue para poder recibir la herencia de tu abuelo, para que tú y yo pudiésemos vivir como queríamos.
-Amo a mi esposo -repitió ella.
-Sue y yo hemos terminado. A quien de verdad amo, es a ti.
La tomó de ambas manos y, al mirarlo miley a los ojos, vio que empezaba a ponerse furioso por el temor de hacer el ridículo.
-Todavía tenemos una oportunidad... puedes... divorciarte y venirte a vivir conmigo. No sabes lo mucho que he lamentado haberte hecho sufrir y lo mucho que te he echado de menos.
A ella no le gustaba herir a nadie, y en esos momentos comprendía que quizá la soledad y el aburrimiento habían llevado a liama su amorío con Sue, pero eso no tenía ya la menor importancia.
-liam -lo interrumpió con un pequeño temblor en la voz.- nick y yo tenemos hijos. Lo siento... yo...
De súbito, liam le soltó las manos y dio un paso atrás. Con aire abstraído, miley volvió la cabeza para ver qué era lo que le había llamado la atención a él.
-Tienes invitados a los que atender -indicó nick con una sonrisa brillante y amenazadora-. Aunque odio tener que interrumpir una escena tan conmovedora. ¿Has oído, miley? ¡Ve a atender a nuestros invitados!
¿Y dejar a liama su merced? ¿Bromeaba? Incapaz de comprender el enojo de nick, se mordió los labios antes de hablar.
-Antes acompañaré a liam a la puerta -se atrevió a decir y, durante un momento, pensó que nick iba a poner alguna objeción, pero él se limitó a contemplar a liam quien se encontraba tras ella, con cruel y divertido desprecio.
-No pensaba tocarlo, miley -y, giró sobre sus talones.
-¿Te habla siempre con ese tono? -murmuró liam, mientras se arreglaba el cuello de la camisa como si le molestase.
-----------------------------------------------------------------------------
espero que les guste en un momento maraton sorpresa de una nove dedicado a yazzy :) bueno disfruten y gracias por sus comentarios chikas

viernes, 10 de febrero de 2012

una proposicion atrevida-cap-59




-En tu lugar, yo no volvería a repetir esa insinuación -la suave intervención de nick desde el umbral de la puerta, los hizo volver a ambos la cabeza. nick se acercó a su esposa y le pasó un brazo por los hombros, mientras contemplaba el ruborizado rostro de kevin-. ¿Qué sucede con la familia Fletcher, ni siquiera en un bautizo pueden controlar su mala educación?
-No me gusta decirlo -manifestó miley al alejarse en compañía de nick-, pero tú tenías razón. Excepto joe, ellos vinieron sólo a criticar.
-Creo que ya se van.
Al comprobar que, en efecto, los Fletcher se iban, nick retiró su brazo, lo que no le extrañó a ella, pues él en raras ocasiones, excepto en público, la tocaba... y hope y jerry ya hacía siete semanas que habían nacido.
Los dos cónyuges se llevaban bien en apariencia, pero dormían en habitaciones separadas... no obstante... ella se sentía más enamorada que nunca. Él hacía un evidente esfuerzo para portarse bien, y miley se preguntó por qué entonces se sentía molesta... sabía que no era justa, pues nick no le había hecho ninguna promesa.
-Voy a ver a los mellizos -dijo.
-¿Y para qué tienen una niñera?
Ella se rió, pues no era extraño encontrar a nick a las seis de la mañana en la habitación de los niños, estorbando el trabajo de esa misma niñera de almidonado uniforme.
En realidad, miley tenía muchas razones para sentir agradecimiento hacia nick, mas, con un presentimiento que no era pesimista sino realista, sospechaba que él muy pronto volvería a reanudar su vida anterior. Ella le agradaba y apreciaba su labor como madre, ama de casa, anfitriona y decoradora de interiores, pues lo había hecho muy bien en el apartamento, el cual estaba ahora mucho más acogedor; y era evidente que adoraba a los gemelos con sinceridad, pero ella pensaba que el matrimonio tenía que ser algo más. Cuando miley llegó al punto de sentir envidia de sus propios hijos, se dio cuenta de lo irrazonable que era.
-Señora -la dijo Thompson antes de llegar a la habitación de los niños-, la busca un caballero, un tal señor Walker. Insiste en hablar con usted en privado... está en el estudio.
miley frunció el ceño. ¿liam? ¿Qué demonios haría él ahí? Se dirigió hacia el estudio y allí estaba, aunque tenía mucho mejor aspecto que en su último encuentro.
En cuanto la vio, empezó a hablar, pero su modo de hablar casi inducía a la risa.
-Me fue muy difícil localizarte, y cuando por fin lo he logrado, me encuentro con que tienes fiesta.
- liam -ella extendió con educación una mano, hacia él-. Tienes buen aspecto.
-Aquel día en el apartamento debía tener un aspecto horrible -comentó él sin soltarla-. Las cosas han cambiado para mí. De nuevo tengo trabajo... y... miley, ¿por qué no me dijiste aquel día lo que habías hecho? Yo no sabía que te habías casado, ni mucho menos el motivo, hasta que hablé con tu primo por teléfono. Él fue quien me relató toda la historia. ¡Qué horrible fue todo eso!
miley trató de retirar sus dedos.
-¿Mi primo? 

martes, 7 de febrero de 2012

una proposicion atrevida-cap-58



Ella logró llegar a la cama antes de sentir un fuerte espasmo de dolor. nick lanzó una exclamación.
-Es el niño -musitó miley al ceder el dolor.
-¿Se... se va a adelantar?
-No lo sé. ¿Hay algún hospital por aquí cerca?
nick entró de inmediato en acción y salió al pasillo para llamar a Thompson a gritos. miley empezó a debatirse en otra dolorosa contracción, la cual fue muy pronto seguida de otra.
-Yo tengo la culpa -expresó NICK al levantarla en brazos-, por la forma en que te saqué del apartamento. Ahora estoy muy nervioso y me da miedo dejarte caer.
Cuando llegaron al pequeño hospital rural, miley fue conducida a la sala de partos, donde le realizaron un apresurado examen.
-¡Cielos, sí que tiene prisa ese niño! -exclamó la comadrona, lo que dio pie a un revuelo de actividad, interrumpida por algunas preguntas que miley apenas si pudo responder.
-¡NICK! -gritó en lo más álgido de otra poderosa contracción.
-¿No podríamos llenar los malditos formularios en otro momento? -preguntó nick enfadado, y unos cuantos segundos después entró a grandes zancadas en la sala de partos, a pesar de la fría mirada que le dirigió la monja que se encontraba allí. Al entrar, se apresuró a acercarse a miley y tomarle la mano.
-Doctora, se escuchan dos latidos -indicó alguien, aclaración que le pareció inútil a miley, quien pensaba que por supuesto que se escuchaban dos corazones, el del niño y el de ella. Pero el comentarío se aclaró a la media hora. Pues dio a luz primero a una niña y en seguida a un niño. Después de eso, nick le plantó un extravagante beso en la frente.
-Señor -sugirió con tono gélido la religiosa-, ¿sería usted tan amable de esperar afuera mientras nosotros terminamos de atender a su amiga?
-Oiga, esta señora es mi esposa -la contradijo nick con calor, ante lo cual miley sonrió. Él parecía orgulloso de decirlo.
Transcurrió un largo lapso antes de que permitiesen a nick estar de nuevo al lado de miley, quien ahora sí se encontraba muy cansada. Los mellizos gozaban de buena salud y eran pelinegros como nick, pero con ojos muy claros, característica que ella sospechó que también provenía de la familia de él. Aunque los dos pequeños estaban un poco faltos de peso, el pediatra aseguró que era normal en sus circunstancias.
-Pasé mucho miedo ahí dentro -manifestó nick ante miley al sentarse en el borde de la cama-. Gracias a Dios que estás bien, porque lo estás, ¿verdad? Y ellos... -su semblante adquirió un aspecto soñador -ellos son muy bonitos; pero... ¿se supone que deban ser tan diminutos y arrugados? ¿Por qué no procuras dormir un poco? Yo me quedaré aquí a tu lado.
Bueno, pensó miley al borde del sueño, si ella no había logrado despertar el amor de ese hombre, era obvio que los bebés lo habían logrado a primera vista. Ella nunca olvidaría aquella mirada de mágico éxtasis que apareció en los ojos de él al nacer los niños... quizá... su entusiasmo no fuera muy duradero, pero miley presintió que se trataba de un lazo que nunca se rompería y cuya existencia ella nunca había sospechado.
-Has cambiado mucho -expresó kevin con cierto tono de reproche-. Pero te ha ido bien. Te diré que nunca esperé ver que nick sentaría cabeza, pero con los niños... -en su pomposa voz surgió un atisbo de burla-, no tenía mucha opción. 
.-------------------------------------------------------------------
soy mala hasta ahi la dejo jojojo sii ahora de la otra

domingo, 5 de febrero de 2012

una proposicion atrevida-cap-57


Contemplaba el absorto rostro de ella y cuando su boca bajo con indolencia para capturar la de miley, pareció por completo natural; pero ella sintió que el corazón amenazaba con salírsele del pecho, y la descarga de electricidad sexual hizo que los huesos se le volviesen de gelatina. Entonces nicklevantó la cabeza y se alejó a prudente distancia. Claro, pensó ella, «¿cómo va a querer besar a una mujer embarazada de ocho meses?» Tuvo la masoquista tentación de preguntarle quién lo esperaba en el apartamento de Londres, pero no quiso arriesgarse a escuchar la verdad. A pesar de las muchas otras mujeres que él hubiese tenido, aún lo necesitaba y lo quería en su vida... así que... quizá hubiera llegado el momento de sincerarse con él.
-En Dominica te vi besar a Mei Ling -expresó de un modo repentino.
-Lo sé -confesó él, aunque sorprendido por la buena memoria de ella.
miley sintió el impulso de arrojarle la botella de champaña.
-¿Es eso todo lo que tienes que decir? -preguntó.
-¡Ella se me abalanzó! -el brillo animal de sus ojos hizo que miley le creyese.
-¿Por qué no me lo dijiste? -demandó miley mientras hurgaba en la canasta.
-Nunca me lo preguntaste. Deja eso, yo te sirvo. Tú descansa. Por la tarde debo tener tu respuesta.
-Creí que ya habías decidido por mí.
«¿Tratas de engañarlo a él? A ti misma no puedes engañarte. En realidad ya has tomado una decisión, pero sacas a relucir objeciones para que él las desmorone de nuevo. No puedes darle la espalda a un deseo que te viene del corazón. No seas egoísta».
-Con la experiencia que me da el haber tenido un padre y tres padrastros, ten por seguro que con la existencia de un hijo nunca te concederé el divorcio.
Aunque él no lo supiera, esa frase fue para ella un consuelo. Viviría en aquella casa campestre y no sería ninguna molestia para él, quien estaría fuera por lo menos dos de cada tres semanas. El niño era muy importante, y para él era mejor contar con la presencia ocasional de su padre, que no contar con él en absoluto.
-De acuerdo -dijo de pronto. Trato de no demostrar demasiado entusiasmo, pero algo debió transmitir, pues nick se volvió a mirarla-. No me gusta vivir sola -añadió-, y el campo es muy bonito.
-Yo estoy incluido en el trato.
-Sí, por supuesto, sería difícil que no fuera así -replicó miley -. Espero que la casa sea grande -ahogó un bostezo y al poco rato, a pesar del escrutinio de él, se quedó dormida.
Le parecía que había transcurrido muy poco tiempo, cuando él la despertó.
-En casa dormirás más a gusto -la ayudó a ponerse las zapatillas.
Diez minutos después, el coche los conducía por un rústico camino que serpenteaba entre el bosque, hacia la casa, la cual no era tan grande como miley se imaginaba y temía, y se erguía en un delicioso lugar rodeado de altos y hermosos árboles, lo que constituyó una sorpresa.
Thompson abrió las puertas aún antes de que ellos acabaran de subir los peldaños de la escalinata... la sonrisa de bienvenida con que él la recibió, hizo sentirse muy bien a miley, quien miró a su alrededor de manera apreciativa. A través de los altos ventanales penetraba a raudales la luz del sol, lo que producía un brillo muy especial sobre los azulejos del espacioso vestíbulo.
-Está demasiado cansada para ir ahora a ver la casa -decía nick con una suave risa.
Ella no se sentía así. Ya no tenía sueño, pero como persistía su dolor de espalda, decidió que lo más aconsejable sería acostarse y descansar un rato.
-Me gusta mucho la casa -musitó mientras subía la amplia escalinata, ayudada por nick.
-Me alegra que te guste -abrió una puerta de paneles y en ese preciso momento miley emitió un jadeo al sentir una extraña sensación de contracción en los músculos del vientre.
-¿Qué sucede? -preguntó nick preocupado. 
-----------------------------------------------------------------
Bueno chikas hasta aquie les dejo espero que les guste y lo disfruten, un cosita mas amm dirán otra vez ya va a comenzar ,pero espero que visiten estos blogs y los lean lo mas importante los lean por que esta chica si que sabe escribir miren ya hasta me dejo sin uñas y es jeny ok ya la mayoría la conocen pero si me gustaría que pasaran por su blog y se fijaran que tan hermoso escribe http://novelanileytwomorelonelypeople.blogspot.com/ y tambien si podrian pasar a mi blog donde escribo con ella y subimos one shots :D http://giveyourheartabreakoneshots.blogspot.com/ y tambien a un blog que hoy me cre con mi amix perve o shi pero este no es de noves ni nada  de eso en este aran sus pedidos de escenas hots por si le sinteresa estan invitadas a pedir y a visitar http://magicalfantasyhere.blogspot.com/ asi que espero que se pasen y poes ahi les podremos dar tambien sugerencia ok esto es todo por hoy cuidanse y las quiero besotes grandes

una proposicion atrevida-cap-56


-Ha sido muy difícil vivir con él desde que volví sin ti del Caribe. Tú le agradas mucho -nick descorchó la botella de champaña y sacó dos copas-. Yo creo que ha estado a punto de incluir también unos candelabros, con sus correspondientes velas, y tal vez lo hubiese hecho si no brillara tanto el sol. Es un verdadero romántico. Sé que él me culpa por lo sucedido. Y he aquí que mi esposa me dejó por otro hombre, para colmo un enano.
-nick -le llamó ella la atención con un susurro.
-Para vivir en una abyecta pobreza con su amante -continuó nick mientras le pasaba una espigada copa de cristal-. Si lo supiera, pensaría que yo soy un monstruo depravado y que te había hecho algo muy feo para inducirte a ese proceder. Al ver que estamos juntos de nuevo, el pobre hombre podrá recobrar la tranquilidad.
-No, nick, esto no funcionará -declaró miley con toda calma, aunque sentía un nudo en la garganta-. Y no estás en deuda conmigo.
Deseó con toda el alma que él dejara de intentar convencerla. Con cada segundo que pasaba en su compañía se le hacía más difícil y dolorosa la negativa; se preguntaba si habría algún daño en decir que sí... y eso era peligroso.
-¿Quieres decir que, ahora que has logrado quedarte embarazada, no te soy necesario para nada?
Ella tomó un sorbo de la burbujeante bebida que le hizo cosquillas en la nariz.
-¿Por qué no puedes ser honesto?
-Demasiada honestidad puede ser peligrosa -le dirigió una intensa mirada de observación-. El problema no desaparecería.
-Un niño no es un problema.
-Lo es si actuas como si yo no hubiese tenido nada que ver con su concepción.
Ella miró sin apetito la ensalada de langosta y se colocó una mano en la base de la espina dorsal para dar masaje a su dolorida espalda.
-Fue un accidente.
-Al niño le va a encantar saberlo -aseguró nick con frialdad.
-Creo que en estos últimos meses te has divertido más que en muchos años, ¿verdad? Y todo para compensar los sufrimientos de tres semanas de matrimonio.
-Cuatro -corrigió él con agrado-. Recuerda que fuiste tú quien decidió irse.
Puesto que él no la amaba, eso era lo correcto... con la clase de vida que nick llevaba, no necesitaba a nadie. Las emociones sentidas por miley le eran desconocidas, por ser inmune a ellas... pero... a pesar de eso, sabía lo que tenía que decir y hacer para fingirlas.
-nick no quiero hacerte desgraciado; quisiera que fueras feliz
-¿Y qué es la felicidad? -su sonrisa estaba impregnada de cinismo-. Pero no me mires así, miley... eres tan inocente, que a veces me siento como un anciano de un siglo de edad. Hace un año eras feliz al hacer planes para tu futuro con liam y yo no planeaba el mío con nadie... todo eso ha cambiado ahora... no es posible dar marcha atrás al reloj. Esta es la única cosa decente que he hecho en mi vida.
-Nuestro matrimonio no fue por amor -declaró miley con tristeza, mientras nick volvía a llenar las copas.
-Tampoco lo fue el de mis padres y no obstante sobrevivió. Nosotros no hemos hecho un verdadero esfuerzo... quizá... si no esperará tanto uno del otro, también podríamos salir a flote. 

una proposicion atrevida-cap-55


-Ya me imagino -comentó mientras examinaba el contenido de los paquetes.
-¿Cuándo llegará? -preguntó nick aclarándose la garganta.
-¿Quién?
-El niño -contestó él con impaciencia.
-Lo siento. Dentro de tres semanas.
-¿Qué quieres que sea?
-A Dios no se le pueden dar órdenes.
Él se echó a reír y entonces se inclinó para tomar entre sus dedos uno de los tobillos de ella.
-Está hinchado, como tus dedos. ¿Es normal?
-Supongo que es a causa del calor.
-Tal vez -no pareció muy convencido, y miley pensó que esa hinchazón tal vez se debiera a que la noche anterior había estado paseando de un lado a otro de su dormitorio, porque no podía dormirse-. Hoy descansarás -aseguró nick.
Le había comprado tres vestidos, todos a la última moda. Una hora después, hizo detener el coche en cierta parte de la carretera; él salió del vehículo, acompañado por su ruborizado chofer para que miley pudiera vestirse.
-Tu chofer debe pensar que estamos locos -manifestó miley una vez que estuvieron de nuevo en camino.
-No sé. El secuestro de esposas es divertido -sonrió-. ¿Te sientes mejor?
Ella asintió. Ya que había logrado su objetivo, nick podía permitirse el lujo de reír y bromear. Dirigió una mirada de soslayo al hermoso perfil de su esposo, y sintió que su propio cuerpo generaba una miley respuesta.
-Hice que Thompson nos preparase una cesta para un día de campo -anunció nick.
-¿Día de campo?
-¿Por qué no? -su tono era cortante-. ¿Sabías que nunca en mi vida he ido a un día de campo?
Era mediodía cuando el automóvil se dirigió por caminos vecinales hasta llegar a una zona sombreada donde por fin se detuvo. Con toda solemnidad, el chofer sacó del portaequipajes una cesta y una manta.
-Ya nos encontramos dentro de los terrenos de Wytchwood -informó nick con una sonrisa-. Por eso conozco este lugar.
Estaba tan entusiasmado con su idea del día de campo, que miley sonrió... el mero hecho de ver la vitalidad de nick la hacía sentirse más animada... se sentía profundamente atraída por él. Nunca querría a nadie más que a él, y con tristeza deseó haberlo podido conservar como amigo... pero... en ese caso ella no tendría su niño y, egoísta o no, todavía sentía una inmensa felicidad por el hijo que llevaba en sus entrañas.
Tuvieron que caminar sólo unos metros para llegar a un bonito lugar junto a un arroyo.
-¡Qué lugar tan bonito! -expresó miley-. ¿Queda la casa lejos de aquí?
-Más o menos a kilómetro y medio -respondió nick mientras extendía la manta.
Ella tomó asiento y, con alivio, se quitó las zapatillas, mientras nick se desperezaba con sensualidad al calor del sol, haciéndola sonreír de nuevo. Abrieron la canasta, y descubrieron una gran variedad de ricos manjares.
-Un buen trabajo de Thompson -musitó miley ante tantas delicias. 
----------------------------------------
empiesa la cuenta regresiva de esta nove estem la de mm splen aww no se ni el titulo de mi propia novela pero ya saben cual esa y esta terminaran esta semana posiblemente y juntas asi que ocmneten mucho y muchas gracias por sus coments me hacer muy feliz