lunes, 26 de diciembre de 2011

el antes y ahora niley one shot


España, Madrid. Año 1727.

—¡Mi padre nos puede descubrir, nick!—exclamó cuando su espalda chocó contra la pared del establo de detrás de su casa, haciendo que su pecho se presione por la fuerza del impacto.
—No me importa des, que nos descubra, nos amamos y eso no lo puede cambiar.
Sus besos repartidos por la cara femenina aumentaban el calor del espacio, y sus manos recorrían sin vergüenza el escote, el corsé y los muslos, trayendo el cosquilleo tan conocido en su parte más intima. Ella también lo deseaba y más cuando la adrenalina ululaba cada centímetro de su ser.

La manos más pequeñas formaban círculos en los gruesos hombros masculinos, su cadera se refregaba concienzudamente contra la masculina haciendo que su miembro se estire, sin embargo era imposible palparlo por todos los vestidos que llevaba sobre si misma.
Sus labios se tocaron con el deseo creciente de dos adolescentes enamorados. Fuego y deseo, conforme no dejaban de acariciarse y jadear hasta lo imposible.
—Oh… Esto es imposiblenick…por favor, no nos haga esto que si mi padre nos descubre lo va a matar—intento decir ella entre beso y beso.
Y tenía razón, el padre de des era un señor feudal con basta tierras y poder. Sobre todo lo ultimo. Para Don Correa, lo más importante era el prestigio, no una vida humana y que su hija se este encontrando con un esclavo de estancia no era muy digno. Por supuesto que no.
Los ojos marrones de él se encontraron con los azules de ella con tanta resignación, amor y deseo que el pecho femenino se acongojo por todos los sentimientos que debían reprimir cuando Lord Villamayor iba una vez por semana a verla, según su padre ese era un buen partido.
Y tenía razón, era apuesto, tenía dinero y un por venir exitoso.
Pero no era eso lo que su corazón le decía y fue por ello que una lágrima de amor se le escapó y recorrió la mejilla que sutilmente nick acarició para secarla.
—destiny, vayámonos—susurró de pronto—, alejémonos de este lugar, seamos libres los dos.
—¿Qué?—reculó ella abriendo los ojos—¿Y como sobreviviríamos?
Vio cuando sus palabras le dolieron, pero ¿Qué harían? Él era un esclavo y ella todavía no había aprendido a leer o a escribir correctamente, y si se educaba era a escondida de su padre.
—¿Eso importa? Mi amor, no me gusta verte tan acongojada…
des aferró su nuca y lo besó con todo su corazón, llorando por lo imposible e inevitable de esa situación, por cada cosa que en su pecho era reprimida. nick la abrazó hasta sentir el calor de ella en el cuerpo, el cuál demandaba un abrazo más íntimo. Las manos masculinas subieron por su estomago hasta llegar a las protuberancias marcadas por un punto en el medio, el cual apretó y quiso tenerlos en su boca, saborearlo con la lengua con desesperación, por lo que, sin pensar, izó los muslos de la mujer, subiéndola a su altura. Luego, con un gruñido se enterró en su escote, pasando su lengua con lujuria y ella exhaló un gemido tan sensual que lo desesperó…
De pronto, el viento helado, los caballos y cada ruido que se habían escuchado, se silenció preconizando lo que después sucedería: la puerta se abrió demostrando al capataz al lado del Lord Correa.
—Miré que tenemos aquí Lord, le dije que no podíamos confiar en este perro.
dest y nick se irguieron y acomodaron como pudieron, pero sabían en lo profundo de su interior que esa sería la ultima vez que se verían.
Su padre dijo solamente dos frases:
—Atenlo al troco y denle latigazos hasta que se muera. Y tú—la miró con odio—iras a un campamento de monjas, ya no eres más mi hija.
Después de eso, se retiró.
des después de ver morir a su amado no habló por dos días, tampoco comía o bebía agua, solo esperaba el mismo fin con paciencia. Sabía que llegaría la muerte para ella y con valentina en la venas se alegraba que así fuera, porque nunca a des a nadie como amó a nick.
                                      **************
Argentina, Buenos Aires. Época actual, clase de historia.

miley suspiró por enésima vez cuando el nuevo—hermoso, simpático, joven y apuesto— profesor de la cátedra repitió el mismo tema como si estuviera condenado a explicar siempre lo mismo “amor eterno entre los personajes de la historia” y lo más novedoso era “¿pueden dos personas enamorarse en un tiempo y reencontrarse en otro?”. Había muchos filósofos que lo creían, al igual que la religión, ya que algunos dicen que tenemos más vidas de las que creemos y por ello hay veces que tenemos recuerdos que no son nuestros, o afinidad con personas de nuestro entorno que va más allá de un trato que nos gusta.
¿Pero el amor? Es diferente con una persona que conocemos en el tiempo en el que vivimos y en la que cocemos de más de una apoca, porque el sentimiento es más profundo y el corazón reacciona de una manera distinta, como si estuviera más vivo.
—Ya me aburrí, me voy a casa—dijo Demi, su mejor amiga.
Los ojos de miley no la miraron pero susurró.
—Yo también, esta clase se esta tornando muy aburrida.
Sin más, arreglaron sus cosas, se pararon y siguieron hasta la puerta. El profesor no las miró, al contrario siguió con su monologo de tres horas. Sin embargo, la última frase que dijo a miley la turbó despertándole algo en su interior:
—…cuida a la vida en ti, que yo por siempre estaré para ustedes.
                                      ****************
Cuando llegó a su casa, miley se sentía realmente extraña y la curiosidad la estaba matando ¿A qué venía esa frase? ¿Por qué la hacía entristecer como si fuera tan importante?
Con el enojo y los ojos llenos de lagrimas abrió la carpeta de historia par saber a qué romance pertenecía esa frase que tanto la carcomía por dentro.
Las hojas pasaron, las palabras también y no, no había nada…
—Esto…no esta pasando—dijo con una mano en su corazón el cuál latía fuerte cada vez que su cerebro recordaba las palabras con suma precisión como si hubieran sido dichas para ella.
Vio la computadora y no lo dudó cuando tipeó la frase para saber quién la había dicho…
“Lord Villamayor (1710-1744), conocido por sus conocimientos en la economía agropecuaria y en Ciencias Económicas. Fue esposo de…
Bla, bla, bla.
“…reconoció públicamente que le había afectado la muerte de una joven llamada dest Elena Correa, la cuál, se descubrió posteriormente, estaba embarazada de un esclavo de su misma ascienda….”
El pecho se le cerró de golpe y su respiración se hizo cada vez más difícil. Algo quería asomarse, algo dentro de ella que era imposible y un nombre al cerrar los ojos se le dibujo como por arte de magia, marcando en su pecho fuego y amor:
nick.
                                      ******************
Al otro día…
Respiró fuerte cuando terminó la clase esperando que ella haya captado su mensaje porque de verdad ya estaba se resignando al imposible en cada eterna época en la que la encontraba. Si, él lo sabía, su madre siempre le había hablado de la posibilidad de vivir en cada tiempo si uno lo quería, fue por ello que no dudo cuando la noche anterior a encontrarse con dest en el establo hizo el hechizo que los inmortalizaría para vivir en cada época en modos diferentes. El problema era que ella no lo sabía y eso lo estaba matando.
Una lágrima le rozó el labio conforme acomodaba los papeles para irse a casa y encerrarse como siempre lo hacía.
Vio como uno a uno los alumnos se iban y supo que ella era la primera, siempre.
—Necesito hablar con usted, profesor.
El aire se le agolpó y casi lo inmovilizó, pero no se giró cuando dijo.
—Muy bien, miley, muy bien.
Los dos esperaron en silencio conforme hasta el último se retiró. Sin embargo, los ojos de ella nunca se escaparon a los de él, porque los conocía.
—Estamos solos—susurró él—dígame señorita.
Tenía miedo de decir su nombre, porque quizás no era por lo que él pensaba que ella le hablaba.
miley respiró profundo antes de decir lo que quería porque era ilógico que su corazón latiera de esa forma, que su boca buscara la suya con tanta intensidad y que sus únicas palabras fueran:
—Ven a mi casa, esto hay que hablarlo en un plano mas intimo.
Y no la avergonzó decirlas, al contrario.
Lo único que se dignó a hacer él por el nudo en la garganta fue asentir.
                                      *****************
Los pasos seguros de él al entrar a su casa le dieron la seguridad a ella de cerrar la puerta y girar sobre sus pies para verlo, pero no la parte física, sino, su alma, sus ojos enamorados que le resultaban tan conocidos.
—Dime, acá me tienes—la miró con más intensidad.
Su cuerpo, su piel eran un fuego y no supo cómo llegó hasta él, aferrándose como si eso le valiera la vida, lo abrazó porque su alma se lo gritaba, su corazón se lo pedía y todo en ella estaba entregada a esa persona que a la vista era un desconocido.
—Oh…—lloró—, no sé que me pasa, pero…—se separó para ver los ojos llenos de lagrimas de él—antes que me vaya ayer de la clase dijiste una frase ¿por qué?
—Porque te estuve buscando por siglos, dest, por eso—jadeó de la emoción— y lo conseguí, algo en ti esta cambiando.
mileyen es momento descubrió que las historias que tanto le aburrieron eran verdaderas y que en su interior el nombre que le pertenecía era el mismo que nick había pronunciado…dest.
Deseo del más puro sintieron en su pecho y sin mediar palabras sus labios chocaron en una ferviente exhalación que los hizo gemir por todo lo esperado. Sus manos, así como en su otra vida, se recorrían y reconocían erizándose la piel.
—Oh…Dios—cerró los ojos miley cuando los labios masculinos besaron su mandíbula con la pasión a flor de piel, bajando a su cuello, abrazándola con hambre y lamiendo todo el camino a sus senos, los cuales descubrió desabotonándole la camisa de seda con ágil desenvoltura.
—No tienes una idea de todo lo que te esperé dest—gimió regándola de besos hasta llegar a su sostén de encaje blanco, el cual casi arrancó con los dientes e incluso gruño profundamente.
Rápidamente una a una las prendas cayeron sin dejar de acariciarse, jadear y sentir ese cosquilleo en el corazón, como si este estuviera contento de estar ahí con el otro. Los labios de ella fueron a todo su pecho, absorbiendo las tetillas, bajando a su estomago y encontrando la punta de su pene erguido y temblando.
—No—murmuró él levantándola.
—¿Por qué no?—le sonrió.
—Porque primero quiero penetrarte por esa vagina jugosa—dijo y su mano hizo un camino de fuego por su piel que se instaló en sus huesos cuando tocó su estomago, su pelvis, y por fin estuvo ahí, entre sus muslos, tocándola con impresionante conocimiento; sus dedos rodearon el clítoris e hicieron un redondel con él.
—Oh…si…—gimió miley
—Te gusta así—afirmó él.
En un movimiento la hizo acostarse al suelo, fue algo tan extrañamente familiar que miley lo hizo sin pensar, se recostó suavemente en el suelo cubierto por una alfombra y sus muslos se abrieron para dejarle el espacio a él. Sus corazones latían fuertes, la piel se sensibilizó al tacto dejándola al descubierto para él, porque así se lo decían sus sentimientos.
—Esto es tan extraño—suspiró miley cuando el cuerpo de él la tapo por completo.
—Si—sonrió—. Me estoy dando cuenta que no sabes mi nombre actual—sonrió aún más.
—No—río ella—¿Cómo es?
—nick—se carcajeó y eso hizo que el pecho femenino se inflara como nunca antes sintiéndose en casa por primera vez en la vida.
Sus cuerpos que no había dejado de reaccionar sexualmente, se encontraron en la mitad de sus risas, acompañado de besos repartidos por el rostro, el cuello, caricias que les quemaban la piel y miradas llenas de pasión y amor.
—Espera—lo alejó para darse vuelta y clocarse en cuatro—. Ahora si—le sonrió por un hombro.
—Oh, si—gimió nick aferrando sus caderas y apoyándola con astucia, su pene chocando la entrada de la vagina húmeda e hinchada, la cuál fue llenada por su miembro grueso en un segundo.
—Dios…—exhaló ella en un gemido hermoso y sus caderas comenzaron a mecerse contra él conforme los movimientos masculinos acrecentaban la ligereza y dureza de cada entrada, rellenando cada espacio de su cueva.
nick se apoyó en su espalda regando de besos cada ínfima parte conforme los movimientos de ambos no cesaban, eran incansables y los gemidos eran la gloría terrenal que tanto tiempo había esperado. De pronto, recordó que a dest siempre le había gustado que le jalaran el pelo, fue por ello que se arrodilló y con un gruñido hizo lo que a ella le había excitado con movimientos salvajes y recordados.
—Si, así….nick, así—jadeó ella al sentir el primer tirón.
miley flotaba en un mar de orgasmos como nunca, el calor de su cuerpo se incrementaba a estocada, a cada gemido de nick, a cada tirón de sus cabellos. El pecho se le inflaba por algo que iba más allá de un amorío…porque eso no era algo pasajero, la pasión, esa pasión iba a través de los tiempos, de las personas… ¿Qué hubiera sucedido si ella hubiera estado casada o hubiera tenido hijos, lo hubiera aceptado? Por supuesto se dijo conforme no dejaba de gemir por los dulces orgasmo que su matriz estaba sintiendo, porque no era algo de ahora era algo de siempre y eso su corazón lo sentía, su alma bailaba dentro de ella, feliz por fin.
El orgasmo los recorrió en un espiral que no tenía límites. Jadearon hasta estar saciados de momento, se recostaron y un suspiro se apoderó de sus bocas.
En casa, ellos estaban en casa.
—Perdón—dijo de pronto miley.
nick abrió los ojos y la miró.
—¿Por qué?
—Por…matarnos—susurró con lagrimas en los ojos conforme sus manos fueron a su estomago.
Claro que lo comprendió, le estaba pidiendo disculpas por haberse suicidado hacia más de doscientos años. Sin embargo, él no pensaba así.
—No, no debes redimirte por hechos que sucedieron en le pasado—se acomodó para mirarla mejor y secarle una lagrima—. Mírame, amor, mi pétalo de rosa, la lluvia de verano que me hace sonreír—susurró él cariñoso—. Las cosas sucedieron y están hechas, pero ahora, en este tiempo tenemos mucho por vivir—le acarició el estomago y los ojos de ella lo miraron rápidamente—, no nos cuidamos—sonrió.
—Oh Dios—jadeó de emoción miley—. Tienes razón.
—Tenemos toda una vida, de aquí a la eternidad.
Después se besaron e hicieron el amor con el sentimiento más puro que se haya conocido.

3 comentarios:

Alejandra dijo...

me encanto, estubo genial
me gustan mucho las historias qu tengan que ver con vidas pasadas o cosas asi
alfin puedo comentar!!!
besos amiga =)

Agustina Belen Cyrus ✝ dijo...

AIII SARIII ME HICISTE LLORARRRRRR :'( ERA TRISTE Y TIERNO A LA VEZ ♥ eso es amor eterno, ojala existiera, encerio llore, te quiero hermanitaaaa perveeee ♥ jajajaj

Malena♥ dijo...

aaaaaaaaaawwwwwwwwww sariss eso estubo hermoso re triste tierno una historia muy singular bella y magnifica me super super encantoo re linda espero que subas otra!!!!!!!!
atte.Male