viernes, 13 de mayo de 2011

boda por contrato-cap 15

 Nick, por favor...
Él apretó los dientes y siguió moviéndose. La sensación fue tan placentera que a ella se le escapó otro grito. La tormenta de deseo continuó como si no hubiera habido interrupción alguna.
Y aquello fue como ella nunca se lo había imaginado. Atrapada en el ritmo primitivo que él dirigió, se sintió cada vez más excitada y el placer cada vez alcanzó más altura. Cuando llegó a la cima, se estremeció oleada tras oleada.
Después, se quedó simplemente anonadada. Estaba muy cerca de nick, con una curiosa sensación de paz y tranquilidad. Él le dio un suave beso en la frente, como una caricia. Le gustaba tanto estar en sus brazos... en esa intimidad que no había conocido antes... De repente recordó que Nick se había dado cuenta de que él era su primer amante. Ella no había pensado en la posibilidad de que eso pudiera cambiar su relación. Pero se le ocurrió que ahora Nick aceptaría que ella no lo había engañado con David diez años antes.
Nick hizo entonces un movimiento súbito que la pilló por sorpresa y se levantó de la cama. Tomó la botella de champán que había en una cubitera con hielos y la descorchó.
—Sorpresa, sorpresa. Y, por supuesto, tú no me previniste de que iba a ser el primero. Sin duda, te imaginaste que, al ser virgen, técnicamente hablando, eso lo dejaba todo claro-dijo él sirviendo solo una copa.
Miley se sentó y se tapó con la sábana, desconcertada por lo que él acababa de decir.
Nick se tomó el champán de un trago y dejó la copa vacia sobre la mesa para mirarla a ella a continuación.
—No me extraña que estuvieras tan callada en la cama. ¿Creías que ahora me iba a arrojar a tus pies suplicándote que me perdonaras?
—La verdad es que no sé de lo que me estas hablando.
—Esto no cambia nada. Está claro que Selena os interrumpió a David y a ti antes de que os pudierais aprovechar de vuestro sórdido encuentro. Pero eso no hace que tú seas inocente. Aun así me traicionaste y deshonraste. ¡Te comportaste como una zorra sin remordimientos!
A Miley la afectó mucho esa nueva interpretación de los hechos y, por primera vez, se dio cuenta de una posible realidad.
—Tú me odias de verdad —susurró.
—¿Y qué te esperabas después de lo que hiciste? Nos cubriste de vergüenza a todos.
—Pero tú... acabas de hacerme el amor...
—¿Crees que esto ha sido hacerte el amor? Solo he consumado nuestro trato, Miley. Aún me sigues volviendo loco de excitación, pero lo que hemos compartido ha sido sexo. Y, como te prometí, los dos hemos disfrutado de la experiencia, pero no busques más que eso de mí. Ahora tienes el mismo aspecto que cuando te pillaron con David. No tienes ninguna lealtad y menos principios. Eso es lo que menos me gusta de ti.
Miley levantó la barbilla y murmuré fríamente:
—Espero haberme quedado embarazada. Todo esto me parece muy aburrido. Aquí estás tú, con veintinueve años, y sigues atado a un pasado que yo dejé atrás hace años, junto con otras cosas infantiles.
Nick la miró furioso.
—Ten cuidado con como peleas, pethi mou. Ya ha sufrido por ti demasiada gente y no tengo la menor intención de que lo vuelvas a hacer.
Él abandonó la habitación. Ella se levantó recogió toda la ropa que se había dejado y la tiró por la puerta. Se quedó en medio de la habitación, desnuda y temblando. Tiró de la sábana y se envolvió en ella. Luego, se sirvió una copa de champán para ver si se tranquilizaba.
Pero ni aun así pudo evitar recordar el día, hacía diez años, en que se había complicado todo.
Esa mañana, Selena le había pedido que fuera de compras con ella.
—No me puedo creer la forma en que te manda Nick —le dijo Selena mientras se tomaban un café—. Por ejemplo, los planes que tiene para divertirse esta noche. Si yo estuviera comprometida con un tipo tan atractivo como él, no lo dejaría ir a un club nocturno sin mí.
—No quiero que Nick piense que estar comprometido signifique que me tiene que llevar a todas partes.
—¿A todas partes? Ya te deja en tierra cuando se va a navegar. También cuando se va a París a ocuparse de alguno de los negocios de su padre. ¿Por qué no les damos una sorpresa a los chicos esta noche? Podemos ir al mismo club y verlo que hacen sin nosotras.
Al principio, la idea no le hizo mucha gracia a Miley. Cuando Nick la fue a ver esa tarde, ella le pidió ir con él. Cuando él se negó, le dijo que saldría entonces con Selena.
—De eso nada —respondió él—. A su familia tampoco le gustaría. Solemos ir en grupo a los clubs y así cuidamos los unos de los otros.
—Pero acabas de decirme que no puedo ir contigo esta noche.
—Es una fiesta de chicos, ¿de acuerdo?
Eso fue lo que produjo su primera discusión. Después, Dulce llamó inmediatamente a Selena para aceptar su idea. Al principio, pareció algo divertido, pero cuando el taxi las dejó en el club, lo que más quería Miley era arreglar las cosas con Nick.
Se encontraron a David sentado solo a una mesa con las llaves del coche de Nick delante. Cuando Miley le preguntó sorprendida dónde estaban los demás, él murmuró algo sobre que se habían ido a una fiesta a otro sitio.
Miley apenas se había sentado cuando Selena exclamó:
—¡Oh,no!
Siguió la mirada de Selena y vio a Nick apoyado contra una columna, abrazando a una risueña rubia, mostrando un entusiasmo que nunca había tenido con ella.
—¿Quién es esa? —pregunto.
—Raquel. Una ex novia de Nick. Es una modelo italiana. Salgamos antes de que él nos vea.
Selena tomó las llaves del coche de Nick y se las puso a ella en las manos.
—Afuera podremos hablar sobre lo que hemos de hacer. ¡No puedes montar una escena aquí!
Miley estaba como atontada. Casi habían salido cuando Selena se detuvo y le preguntó:
—Dime, ¿te ha gustado ver cómo se divierte Nick?
—¿Perdona?
—¿Quieres saber lo que Nick piensa realmente de ti? Me lo ha contado. Piensa que eres gorda y estúpida, sin ningún atractivo sexual, ¡pero que vales tu peso en oro!
A Miley se le hizo un nudo en el estómago.
—Tu abuelo y el padre de Nick acordaron vuestro matrimonio antes incluso de que tú llegaras a Atenas. Todo el mundo lo sabe. ¡Sin tu futura herencia no eres nada! Si Nick necesita consolarse con chicas más atractivas, ¿quién lo puede culpar?
Sorprendida por semejante malicia de su supuesta amiga, Miley salió corriendo hacia el aparcamiento y se metió en el coche de Nick para llorar a gusto. Llevaba allí casi media hora cuando se abrió la puerta del conductor. Ella se quedó helada pensando que sería Nick. Pero era David.
—No quería hacer esto, pero aquí estoy de todas maneras -dijo él con voz de borracho—. Estás incordiando a todo el mundo, Miley ¿Por qué has venido a Grecia?

3 comentarios:

Lucia dijo...

me encantooo
pobre Miley
Nick le a dado
la vuelta a todo!!
sigue pronto!!

Yazmin dijo...

chan chan chan jaja
ok me gusto todos los cap
cuidate bye
sube pront.

Anónimo dijo...

HERMOSO EL CAP!!! pobre miley! :(seguila!!! esta hermosa la nove!!
chicas alguna de uds tiene twitter?? si tienen twitter agreguenme el mio es agusfancyrus