Entonces
Kimi estaba a su lado otra vez, apaciguándola, rescatándola. ―Parece
que podría tomar un poco de aire fresco, dulzura.
―Sí,
podría. Gracias.
Una
vez afuera, Kimi dijo:
―¿Qué
pasó? ¿Janet te sermoneó porque tú y nick viven en el pecado?
―No.
Nada de eso.
―¿Entonces
qué?
Antes
de que pudiera instruir a su lengua para quedarse quieta, miley explotó:
―Nunca
he conocido a tantas personas genuinamente amables en mi vida y eso era como
que ellos estaban encantados de conocerme, no mirándome de costado
preguntándose quién diablos se estaba colando en su fiesta.
Kimi
se rió ahogadamente.
―¿No
estás acostumbrada a eso?
―No.
Estoy acostumbrada a que la gente me ignoren o me adulen porque quieren algo de
mí.
―No
puedo imaginarme lo que eso ha debido ser mientras crecías, siempre
cuestionando los motivos ocultos de las personas. Debe ser difícil confiar no
sólo en ti misma, sino en todos los que te rodean.
―Lo
es.
―Como
puedes ver tú eres parte de nosotros, querida. ―Kimi
enganchó un mechón de pelo suelto detrás de la oreja de miley y se murmuró―,
caramba. Eres es un poco tímida, ¿verdad?
―Entre
otras cosas ―estudió
los ojos amables de Kimi―.
¿Es obvio?
―Sólo
para mí.
Miley le dirigió una mirada escéptica y Kimi chasqueó.
―Está
bien, es un poco el instinto de madre, y otro poco porque nick me hizo prometer
que te cuidaría porque él no puede estar contigo. Está preocupado por dejarte a
solas tratando con nuestra loca familia.
Ese
hombre se caracterizaba por la dulzura y algo innegablemente caliente se movió
a través de miley.
Kimi
apretó el hombro de miley.
―Incluso
sabiendo eso, y tan divertidas como estamos, me temo que tendré que dejar que
te las arregles sola por un rato. El rodeo está a punto de empezar. Mejor
quédate tranquila y te encontraré más tarde.
miley trepó las escaleras de las enormes gradas. Las nubes cubrieron el sol, aliviando
una parte del calor. Amarró a su soñolienta bebé en el Snugli, ató éste a su
pecho y se quedó parada a la par de la verja de hierro. El ruido de la multitud
no molestaba a Eliza. miley se tomó un minuto para respirar todo esto. Los
perfumes, las vistas, los sonidos del rodeo. Nada como esto en el mundo.
Un
bronco ensillado cabalgó hacia el extremo y el novillo forcejeando —bulldogging— estaba dispuesto a
comenzar. Escuchó a los speaker resaltando las cualidades necesitadas para ser
un gran bulldogger, y no podía comprender por qué algún hombre se lanzaría de
un caballo en movimiento para forcejear con los cuernos del animal.
―¿miley?
Sobresaltada
porque alguien la había llamado por su nombre, miró hacia abajo y vio a Chassie
sonriéndole mientras la miraba hacia arriba.
―Ey.
¿Quieres venir a sentarte con nosotros? ―Chassie señaló a un grupito de personas
en la parte más baja de la verja de hierro.
Sí.
―Oh.
No quisiera aprovecharme.
―Tonterías.
Eres familia y a nosotros nos gustaría que vengas. ―Chassie
guiñó el ojo―.
Siempre estoy buscando darle un empujoncito a un chisme Jonas. Además, será
divertido. Te lo prometo. Nada como el caos en la carpa de reunión de la
familia West. Te veías un poco asombrada.
―Lo
estaba. ―miley siguió a Chassie y escuchaba mientras ella hacía las presentaciones.
―Todo
el mundo, ésta es Miley Ellison, y la bebé dormida es la terrible Eliza Belle,
de quién el orgulloso papá nick se ha estado jactando delante de todo el mundo
sin parar. ¿Así que quién es el próximo? Nombre y relación familiar para
facilitarle las cosas a Miley dado que ella ya se ha expuesto a la familia
West hoy.
―Soy
Macie Jonas, nos hemos encontrado en tu tienda unas pocas veces.
Se
habían encontrado, pero por alguna razón Miley no la había asociado con la
familia Jonas.
―¿Tú
administras el Dewey?
―Lo superviso
dado que vivimos en Canyon River la mitad del tiempo.
―Cat
hace un gran trabajo. La comida es maravillosa y el lugar es muy hogareño.
Macie
resplandeció.
―Gracias.
¿Está India aquí?
―No.
Ella se quedó a cargo. Espero que tengamos mucho tráfico debido al rodeo.
Un
hombre alto y delgado con ojos azules Jonas y un motín de rizos rebeldes se
movió.
―Carter
Jonas de la rama de Carson Jonas Soy el primo de nick. Macie es mi mujer, y
nuestro hijo Thane es un par de meses mayor que Eliza. Se divertirán a lo
grande creciendo juntos.
―Incrementando
el infierno juntos querrás decir. Thane y mis gemelos, Rider y Ella, están
haciendo una siesta en la caravana bajo la atenta mirada de Velma. ―La
rubia más mayor, que parecía estar embarazada, le extendió una mano―.
Soy Gemma Gran Cuervo. No estoy relacionada con ninguno de estos patanes Jonas,
excepto por el matrimonio. Mi marido Cash, está en el equipo de amarre con el
esposo de Chassie, Trevor, y lamento decirlo, cariño, pero ellos van a patear
bastantes traseros el día de hoy.
―Sueña
―dijo
Carter―.
nick y Colt están inspirados.
―No,
no. Vencerán papá y Trev.
Chassie
se inclinó.
―PTI, Macie es hija de Cash de
una relación anterior. Carter es el hermano menor de Colt.
―Nunca
voy nunca a recordar toda esta información.
―Lleva
su tiempo, pero lo harás. A pesar de sus similitudes superficiales todos tienen
personalidades muy dispares.
Miley pensó en el comentario de nick acerca de sentirse intercambiable no sólo con su
gemelo, sino también con sus primos Jonas y sintió una punzada de compasión. Si
ella no lo conociera, probablemente sería como todos los demás y lo agruparía
dentro con su familia.
La
voz del speaker retumbó.
―En
primer lugar. Buck Jonas. No es un nombre jonas con el que esté familiarizado.
Carter
se rió.
―El
HDP realmente lo hizo. Dijo
que iba a hacer algo drástico para distinguirse.
―¿Distinguirse
de quién? ―Macie
preguntó.
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