—De acuerdo —aceptó él.
Ella lo miró con sospecha y él vio a la mujer que con tanta
facilidad lo había dejado en Hong Kong.
En aquel momento, Carolina gritó y, sin mirarlo siquiera, miley corrió hacia la habitación de la niña.
Quizá dejara el corazón en una repisa en todo lo referente a él,
pero estaba claro que con la niña volvía a ocupar el lugar que le correspondía
en su pecho.
Él miró la maleta y salió de la habitación preguntándose por qué no
lo dejaba correr. Ya había destrozado la vida de Jasmine, ¿qué le haría a
miley si ella le daba la oportunidad?
Pero parecía que ella no iba a darle esa oportunidad. Probablemente
eso era lo mejor.
Tres días más tarde, en la oscuridad de la noche, miley se
escabulló de la casa y se dirigió al cenador. Se sentó en un banco de piedra y
abrió el ordenador. En cuanto se puso a teclear, una emoción familiar comenzó a
recorrerle las venas. Desvió la conexión a través de un hotel en Suiza, un
aeropuerto de Australia y una docena de otros países antes de acabar en su
departamento dela CÍA. Dulceescuchó el tono de llamada del teléfono del
ordenador a través de los auriculares y al instante le respondió su supervisor,
la única persona en la que podía confiar.
—Patterson.
—Índigo, Alfa, 4—0—8 —dijo miley y escuchó los sonidos que
codificaban la llamada.
—¿Qué tal te va, niña?
Solo a su jefe se le ocurría llamar a un agente de treinta años
niña.
—Bien. ¿Ya hay luz al final del túnel?
—Todavía no. Sigue libre, Va a llevarnos algún tiempo. Me pondré en
contacto contigo.
Su primer instinto le dijo que estaba metido en aquello con Faraday
y que estaba intentando localizarla.
—No puede ser. Estoy bien escondida —dijo echando una mirada hacia
la mansión.
miley estaba entrenada para la vigilancia y sabía mucho más sobre
satélites, armas y terrorismo que sobre cómo se llevaba una casa y a una niña.
Y más que sobre cómo evitar a nick
Él había cumplido su promesa de no tocarla y su relación era
estrictamente profesional. De hecho, ni siquiera la miraba. Se había dedicado a
trabajar noche y día y ella tenía que reconocer que lo echaba de menos.
—¿Sigues ahí?
Ella pestañeó para apartar a nick de su mente.
—Sí. Te mandaré un recuerdo.
—¡Qué bien! ¿Son calcetines?
Se alegró de que la carta donde le explicaba todo va estuviera en
camino. También había enviado ya la cinta con la prueba de que Mark Faraday
había traicionado a su país a una persona neutral. La había mandado a través de
varias oficinas de correos para cubrir su escondite.
—Mejor que eso. Llamaré más tarde. ¿No irá a perjudicar mi carrera
estar unos días sin trabajar, verdad jefe?
A través de los auriculares solo oyó una risa metálica, pero en su
mente la reemplazó por la risa que ella conocía tan bien.
—No te preocupes por eso.
—Me imagino que me estoy poniendo nerviosa. Hasta pronto.
Colgó la línea de Australia primero; no quería dejar ningún rastro.
Era ella la que estaba corriendo todos los riesgos por su país, no ellos.
Guardó el ordenador en el maletín y se dirigió hacia la casa.
Se quedó helada cuando una sombra se acercó a ella en el vestíbulo.
—Vaya, Miley —dijo nick cruzándose de brazos—. ¿Me vas a
decir qué hacías ahí fuera en mitad de la noche? ¿Y con eso? ¿Qué es?
miley se tensó.
—Mi ordenador personal.
Era realmente pequeño y pensó que nunca había visto uno tan
delgado.
—¿Qué hacías con él ahí fuera?
—Usándolo. ¿Hay algún problema?
—Pues sí porque tengo la sensación de que me estás engañando.
Ella suspiró y miró al techo.
—Hacía una noche muy bonita y me apeteció salir.
nick entrecerró los ojos. Sabía que había algo más. ¡Pensó que
quizá había estado hablando con un hombre y sintió una puñalada de celos en el
pecho. Pero, ¿por qué actuaba así? ¿Por qué se ponía tan celoso si no quería
ninguna relación con ella? ¿Con ninguna mujer? No tenía ningún derecho a
preguntarle qué hacía en su tiempo libre.
—¿Y tú qué hacías? ¿Espiándome?
—No. No podía dormir.
«Porque tú duermes bajo el mismo techo que yo», añadió para sí.
—Bien, porque recuerda que la única razón por la que estoy aquí es
Carolina.
Él sonrió de repente.
—Tienes debilidad por los niños, ¿verdad?
Ella inclinó la cabeza, agradecida por el cambio de tema.
—Sí. ¿Quién lo habría dicho, eh?
miley sintió que la recorría de los pies a la cabeza. Llevaba
puesto un camisón, pero él la desnudó con la mirada.
—Sé que Carolina me echa de menos. Estoy a punto de cerrar este
negocio. Cuando lo consiga, tendré más tiempo.
«Entonces, será el momento de marcharme», pensó ella. Solo se
quedaría allí hasta que capturaran a Mark y ella pudiera salir de su escondite.
¿En qué lío se había metido? Se había colado por la niña y el papá la volvía
loca. ¡Vaya! Desde luego, eso era mucho más de lo que ella se había figurado.
—¿Quieres un vino? Eso te ayudará a dormir.
¡Vaya!, se sorprendió él; cambiaba más que el viento.
—Claro.
miley le sirvió un vaso.
—¿Tú no bebes?
—Yo no tengo problemas de sueño.
—Una conciencia tranquila, ¿eh?
—¿Tú te sientes culpable por algo?
—No —respondió él con una sonrisa extraña—. Soy inocente.
Pero sus pensamientos explotaron con las imagines de Jasmine y un
sentimiento de culpabilidad lo invadió.
Su expresión cambió. Tragó su bebida, mirando fijamente a un punto
en la ventana, deseando que el vino borrara la imagen de Jasmine muriendo al
dar a luz a la hija de un hombre que no la amaba.
En aquel instante, no podía recordar ningún buen momento y eso le
dolía tanto como el sentimiento de culpabilidad. Apenas podía recordar a
Jasmine sonriendo, lo que se sentía al abrazarla. ¡Y todavía no había pasado ni
un año de su muerte!
¿En qué clase de hombre lo convertía aquello?
No se merecía nada, pensó y levantó los ojos hacia miley.
miley lo miró con los ojos entrecerrados, preguntándose en qué agujero estaba metido para tener aquella expresión distante y cargada de dolor.
¿Tendría la conciencia intranquila? ¿Aquel tipo con aspecto de buen
chico?
—Esa mirada me está provocando mucha curiosidad —dijo ella.
Él pestañeó.—No es nada.
La sonrisa que le dedicó fue devastadora y ella sintió que se
derretía.
nick se dirigió hacia el mirador y ella lo siguió como un cachorro.
«Patético», pensó al ver su propia reacción. ¿Tan necesitada estaba
de compañía masculina?
Él se dejó caer en un sillón de mimbre y ella se sentó en su
esquina favorita mirando hacia el paisaje. La luna brillaba sobre el agua,
dejando una estela blanca, y ella dejó escapar un suspiro. Aquel lugar era
maravilloso. Si las cosas fueran de otra manera, quizá podría haber soñado con
quedarse allí. Una sonrisa cruzó su rostro por lo absurdo de aquella añoranza.
nick dio un trago a su copa, mirándola. La bata se le había
deslizado un poco por el hombro, y el pelo le caía por la espalda en una
cascada de rizos castaños. Él dijo lo primero que se le pasó por la cabeza.
—Estás preciosa, miley.
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capi dedicado a mi amix ceci espero que te guste :) y un aviso chicas me pueden dejar su msn sipi sipi sipi? por que que creen! bloquearon mi cuenta por no se que cosa uso excesivo así que las agregare al personal que es sara-ago0-1997@hotmail.com y bueno si me dejan su msn y yo las agrego
12 comentarios:
Woooow me encanto esta super increible
ahh ya muero por ver el siguiente pronto siiii
te quedo estupendo me fascino muy lindo
espero el siguiente pronto que esta interesante
si claro es yazminlove2009@hotmail.com
un besito cuidate :D
ME ENCANTOOOOOOOO, GRACIAS POR DEDICARME EL CAP, ESTA CADA VES MAS BUENO, ME GUSTA ME GUSTA Y YO YA TENGO TU MSN :p WIIIIIII SEGUI PRONTOOO! TE QUIERO
sensacional!!
me encanto el cap!!
siguela siguela siguela!!
te mandaré un mensaje diciendo que soy mechame! asi me reconoceras! =D
me encanto tienes que seguirla pronto pliss
ahhh siguela amiixx
seguila ya plisss
me encantoo siguela pronto amix ya el lune snos vemos las caras asi que sube prontooo
me encantoo siguela siguela siguela
me encanto siguela siguela siguelaa
me encantoo quiero maaas
WOW! yo entro y veo toodo lo que me falta por leer,y así será como por dos semanas, vienen las evaluaciones acumulativas y me quedo sin tiempo, que fastidio =/
Me fascina esta serie y mi MSN es marlys_osca@hotmail.com
=D
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